Garantizaron la sanidad de los cerdos de la zona

A raíz del desconcierto causado por la aparición de la llamada “gripe porcina” en el mundo, desde el SENASA insisten en que este nuevo virus sólo se transmite entre humanos y no hay registros en porcinos, en tanto que tampoco se contrae a través de la alimentación. Así lo indicó a La Verdad el Coordinador Regional del organismo estatal, José Luis Ferro, quien expresó que “hoy por hoy podemos asegurar que esta enfermedad es más un problema de salud pública que de sanidad animal ya que el virus no se traspasa entre los animales ni se contagia con la ingesta de cerdo”.
“El virus entró en el cerdo, se hizo una recombinación genética con la influenza porcina y generó este virus nuevo, el A/H1 N1, que tiene mucha morbilidad dentro de los seres humanos, es decir mucho contagio, pero es de baja mortalidad”, explicó el funcionario.A raíz de los casos en México, Estados Unidos, Canadá y España, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria decidió reforzar los controles sanitarios que realiza en los aeropuertos de arribos internacionales y en los puestos de frontera.
Ferro ratificó que “si bien no tenemos casos en nuestra zona y no hay registro en porcinos, estamos tomando los recaudos necesarios, informando sobre esta enfermedad y tomando muestras en los animales para la posible detección del virus”.
"Esta epidemia proviene de un contagio de humano a humano, por lo que no sería la gripe porcina que conocemos, sino una mutación. El contagio se da por aire, no hay riesgos provenientes de los cerdos", explicaron desde el Senasa.
La Organización Mundial de la Salud y la totalidad de la comunidad científica coinciden en que el consumo de carne de cerdo no está relacionado con la trasmisión del agente causal de la epidemia actual de influenza, además la Argentina no importa cerdos de Estados Unidos ni de México por una restricción sanitaria anterior a esta epidemia.
El Coordinador Temático de Sanidad, José Luis Ferro, expresó que no hay riesgo en materia de comercio exterior con los animales ya que “prácticamente no hay exportaciones y el mundo está comprando cada vez menos carnes”.